Objetivos: su importancia en el crecimiento personal

En estos días de final de año es muy habitual pensar en el año que termina, y en el próximo año que llega. Son momentos de reflexiones y conclusiones. Es inevitable pensar en aquellas cosas que queremos conseguir en los próximos meses y aquellas otras que se han conseguido (o no) en el año en curso.

Me gustaria comprender porqué nos planteamos este tipo de cuestiones en estos días, y no a mediados de año o en otra época. Quizás sea debido a que inconscientemente creemos que el inicio de una nueva temporada supone algo así como empezar de cero con más fuerza y con energías renovadas. Cerrar una puerta para abrir otra, sin temas pendientes ni cargas. Nuestra mente hace una limpieza y crea espacio para pensar en el inicio de nuevas metas. Es como un “reset”, muy favorecido en mi opinión por las fechas festivas que producen alegría  y optimismo.

Pero lo cierto es que a priori es una época propicia para marcarse objetivos. Por lo tanto, yo no voy a negar lo evidente y también planificaré mis objetivos para el próximo año.

Tener objetivos que cumplir y trabajar para cumplirlos enriquece nuestras vidas. Tenemos nuestra atención y nuestra energía puestas en aquello que es importante para nosotros. Conseguirlo nos hará mejores personas, además de proporcionarnos motivación y satisfacción personal lo cual es la mejor gasolina para nuestro día a dia.

Sin embargo, no tener metas en nuestra vida nos hace movernos por inercia y cierto desorden. Cuando no tienes claro el camino hacia un lugar, y tampoco sabes cuanto tiempo quieres emplear para llegar, e incluso no sabes exactamente donde vas, el resultado es una situación permanente de pérdida e incertidumbre.

Me atrevo a decir que en la vida hay dos tipos de personas, las que construyen su propio camino y las que circulan por un camino ya existente. Todos seguimos un camino en la vida, nadie está parado en medio de un desierto sin rumbo. La diferencia entre unas y otras es la responsabilidad de diseñar nuestro propio camino, o elegir un camino que la vida te ofrece y cogerlo sin más. Siempre será más retador, emocionante, satisfactorio y motivador elegir nuestra propia meta y el camino para llegar hacia ella.

Por todo esto, te animo a que diseñes tus objetivos y desarrolles un plan estratégico para empezar a avanzar hacia ellos. Aprovecha el ambiente de esta época festiva y alegre. Y no olvides que tus metas son solo tuyas, y pueden ser en apariencia metas pequeñas y poco ambiciosas para otras personas, pero lo que cuenta es lo que significan para ti.

Me despido con una frase del gran Tonny Robbins, que viene muy bien para este tema.

“Para llegar al éxito, se pasa por 3 fases: reconocer que es lo que más se desea, aceptar el precio que hay que pagar para conseguirlo, y pagar el precio”

Un gran abrazo y hasta pronto.

Foto via: exitoalos30.com